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miércoles, 10 de octubre de 2012

Una noche de cumpleaños - I -

    Sentado en mi sillón dejaba pasar el tiempo tras una tarde sin acumulo de nuevas experiencias a pesar del día señalado que era. Mi compañera dormía junto al calor de la chimenea acogida por un feliz sueño que la hacía ser un ángel bendito. Yo estaba sumido en la vaguedad ya que ni leer me apetecía . Dejaba evadirse mi mirada al amparo de la oscuridad y mi pensamiento que fuese libre por el silencio de la noche.
   Una sombra avanzo hacia a mi tras abrirse la puerta. Estaba todo tan oscuro que no distinguía quién podría ser a esas horas. Su feminidad era un baño de estremecimiento en mi cuerpo desnudo y notaba el frescor de la intemperie. La noche se regocijaba en cada sensación que iba acaparando el momento de manera que la seducción de aquella desnudez, que se aproximaba a mi, era un erotismo digno de la mejor novela de amor. 
   Su atracción hacía desvanecer mis ojos. Me tomó de la mano. La llama de la lámpara que daba luz en el fondo de la habitación se contoneaba como el vendaval seductor que tenía frente a mi. En la penumbra descubrí unos ojos verdes que me guiñaban con un atrevimiento impetuoso. Su pelo liso caía sobre su rostro radiante haciendo ver que era una mujer con una plenitud de belleza. Derramaba lujuria al humedecer sus labios con la lengua. Estaba confuso pero ya mi libido estaba en estado álgido y no perdería la oportunidad que me brindaba el destino. No llegaba a coordinar mis sentidos para saber por donde había entrado ni como había hecho para no escuchar ruido alguno...¿ Me abría quedado dormido ?.
   Se me acercó, me tendió su mano incitándome a levantarme e ir hacia las escaleras con dirección hacia la parte superior de la casa. Al levantarme, me susurró al oído: - ¡ Tranquilo. Soy tu pequeño regalo de cumpleaños !. ¡ Sé que es la primera vez que vas a gozar de esta manera ! ¿ Es cierto ?. Seguía sin entender nada. ¿ Quién estaba detrás de todo aquello si mi compañera estaba en casa ?.
   Subimos las escaleras paso a paso como si la prisa no fuese nuestro deseo. Su contoneo me llevaba de la mano como si fuese limpiando mi baba ante la vista de aquellos vaivenes de un culo apretado. Al llegar al pasillo, me indicó que fuésemos a mi habitación. Con dulce afonía en sus palabras, me dijo : - ¡ Vamos a la cama. Vas a disfrutar lo que no has disfrutado en este día tan especial para ti. Te llevaré a los estados que en sueños has deseado alguna vez. Seré tu ninfa de amor y la vestal que quieres poseer ! -
   Era tan elegante en su galanteo, en su desnudez y en su seducción, que no me percataba de nada de lo que sucedía a mi alrededor. Mis ojos solo estaban en ella. La miraba con delicadeza. Estaba embobado por su cuerpo desnudo y deseoso de hacerle el amor. Me acerqué tímidamente a ella . En mi cautela buscaba los secretos que se enredaba en su piel, el contacto furtivo, el ímpetu sexual y derramar todo el frenesí contenido en mi interior producto de la seducción a la que era sometido.
   Me acosté a su lado en la cama. Percibí el dulce aliento salir de su boca. Me besó y cerré los ojos. No quería abandonar aquel momento aunque no sabía si era un sueño o una realidad. Dirigí mis besos hacia su cuello. Su piel desprendía un olor a aromas de hierbas de amor, de felicidad...Abrí mis ojos y contemple su cara que me sonreía muy pausadamente.
   - ¡ Ni siquiera sé tu nombre !- le dije.
   - ¡ No importa, solo has de pasarlo bien con lo que yo te haga !.

Continuará...
 

2 comentarios:

  1. Me has dejado con la miel en ,os labios, espero el siguiente episidio con ansias

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  2. Cumpeaños FELIZ!!!!!!, UMMMMMMMMMMMMMM!!!!!!!!
    esperare el siguiente capitulo y espero que la tarta sea de merengue o nata.
    Besazos dulces!!!!!!!!!!

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